¿Sabes decir adiós a lo malo de tu vida?...

¿Ya sabes decir adiós a los días malos? Pues yo sí, y te enseño cómo: simplemente tienes que recordar que cuando entras a un coche tienes un gran parabrisas y un espejo retrovisor pequeño, esto es para que veas que el camino que tienes por delante es al que le tienes que hacer más caso y estar más alerta que en al camino que dejas detrás y que ya es parte del pasado y del cual solo debes aprender de todo para que en el futuro sepas cómo esquivar lo malo que te venga. El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad, así que, venga, valiente, que hay que tirar para adelante con mucha fuerza. Recuerda que solo cerrando las puertas detrás de uno se abren ventanas hacia el porvenir... Descansa, que mañana tienes un futuro por el que debes luchar... 

Muchas personas creen siempre ser más de lo que son, y se estiman menos de lo que valen, y luego esperan que terceras personas los valoren más que ellos mismos, por eso no puedes dejar de quererte y valorarte por quien eres y por lo que vales... Recuerda que, si las personas han nacido con dos ojos, dos orejas y una sola lengua, es porque se debe escuchar y mirar dos veces antes de hablar... No digas algo de lo que te arrepentirás toda la vida, y más cuando eso que digas acabe con el valor que tienes, ¡tú vales mucho!