Sin lucha no hay victoria…

Mi padrino (alguien que es como un padre para mí), una de las personas más inteligentes e interesantes que conozco, siempre me decía que los seres humanos nacemos, crecemos, envejecemos, pero nunca terminamos de madurar, porque siempre estamos aprendiendo algo cada día, a ser mejores padres, parejas, amigos, jefes, socios, empleados, en fin, mil cosas, y siempre pensamos en el fondo que tenemos dieciocho años y que todo es para siempre, y gracias a esto he aprendido que la vida es un riesgo constante para luchar por ser feliz, por tener lo que quieres, una lucha de la cual no te puedes escapar, ya que, si lo haces, corres el riesgo de quedarte sin nada, y eso haría que fueses un cobarde, cosa que sé que en el fondo ninguno lo somos… Por muy mal que estén las cosas, estamos ahí, frente a los cañones, dispuestos a asaltar la montaña que nos llevará a la cima de lo que queremos conseguir… Sin lucha no hay victoria y, si la quieres saborear, solo te queda pelear, pelear y pelear…