Todos queremos pensar que estamos
preparados para todo en la vida, que podemos ser fuertes ante cualquier
problema, que somos indestructibles, que lo que pasa en la tele o a nuestro
vecino jamás nos llegará a pasar, porque vivimos en un mundo en el que pensamos
que estamos blindados contra esas cosas, que pensamos que son ajenas a nuestra
vida, y cometemos el error de no prepararnos, y cuando nos pasa nos destruyen
tan brutal y rápidamente que muchas veces acaba con lo que somos… Ser fuerte no
solamente se trata de hacerse el duro, se trata de asimilar lo que te suceda, o
lo que te puede suceder, a veces tenemos que ser fuertes contra lo que nos
pasa, contra la gente que se quiere aprovechar de nosotros, contra las
situaciones que nos ponen al límite, contra la desesperación, para evitar
perder la esperanza en solucionar lo que nos pase… Nadie te pide que seas un
témpano de hielo a cada minuto del día, de vez en cuando está bien dejar de ser
tan frío, ya que hay momentos en los que mejor estarás así, siempre que escojas
estar así con la cabeza y el corazón… Pero no dejes que nadie se aproveche de
ti, ni te chantajeen, ni te hagan sentir una mierda, tú vales más de lo que
crees, solo debes poner tu precio, y multiplicarlo por mil…
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