Un amigo de verdad te llama hermano, un amigo de verdad te considera de su familia sin ser de su misma sangre, un amigo de verdad lo encontrarás en la esquina de tu casa como al otro lado del mundo, lo importante es saber que un amigo de verdad no es el que te da dos palmaditas para que sigas adelante, es el que te pega un buen empujón para que cumplas tus sueños. Podemos ser diferentes en muchas cosas, podemos ser distintos, podemos ser de sexos diferentes, pero lo que hace una amistad es algo tan inexplicable que solo lo puedes entender cuando tienes un amigo de verdad…
De repente un día, te despiertas y en lugar de tener a ese alguien que antes te acompañaba ahora te encuentras rodeado de almohadas, de sueños que no recuerdas y con ganas de escribir alguna nueva historia en tu vida, esperando que este día te regale buenos momentos y que las noticias no te hagan perder la esperanza en que a partir de mañana podamos continuar con nuestras estrategias para seguir adelante. Para hoy os doy solo un consejo simple y rápido: No desperdicies tu vida pensando en que, si las cosas no van como las planeas, es una pérdida de tiempo. ¿Acaso intentar mejorar es perder el tiempo?
Durante estos años he aprendido que la ilusión es tan fuerte que te puede sacar del agujero en donde creas que estás metido, y digo creas porque siempre un agujero tiene una salida, y muchas veces no la queremos ver, porque no nos da la gana o porque somos muy cobardes para salir de donde estamos, así que espero que seas valiente hoy, cojas esa salida y dejes ese agujero atrás, que tú no estás para perder tu vida lamentándote de todo, así que reconstrúyete y, venga, que se te hace tarde…
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